Cuando ya te has dado cuenta de que estás envuelta(o) en una relación narcisista, puedes ver qué le has permitido mucho, lo mal que te has sentido, pero con la empatía que tú tienes y él no, has esperado que cambie y que cumpla todas las promesas que te ha hecho de no hacerte más daño.
Pero eso no pasa, vuelve a sobrepasar los límites una y otra vez. Disfruta cada vez que te ve enojada o triste por sus actos. Su aspecto perverso se alimenta cada vez que tú le muestras todo el abanico de emociones que él no puede sentir porque está vacío emocionalmente.
Entonces intentas poner límites, lo que con una pareja normal podría funcionar. Pero con un narcisista esto se vuelve en tu contra. El enojo tiene como función, poner límites, primero pruebas diciéndole al otro que no haga determinada cosa porque te molesta o te duele, después sino hace caso, te enojas y el otro al ver tu enojo comprende que no debe volverlo a hacer. Con el narcisista en cambio, le dices que no te haga algo y te responde con gaslighting, te devuelve la responsabilidad en forma de culpa, dice que eres muy susceptible o que estás loca porque él “no ha hecho nada malo”.
Puede que al inicio de la relación intente parecer empático y asuma su responsabilidad, con una disculpa, pero con el tiempo eso va desapareciendo y no habrá más pedidos de perdón. Cuando pasas al enojo, le reclamas por lo que ha hecho mal y lo mal que te has sentido con ello, se enoja, porque en su forma de ver el mundo tú no tienes derecho a decirle que está mal, que debe y que no debe hacer, solamente espera que tú te sometas a lo que él quiere. Entonces, te castiga, te deja de hablar o se pierde, por días y hasta semanas.
Durante el castigo tú te sientes mal, te preguntas qué debiste haber hecho diferente, que puedes hacer para solucionarlo y cada día esperas que vuelva para arreglar lo que se dañó. Tú culpa se activa porque piensas qué tal vez fuiste muy fuerte o injusta al reclamarle, pero como mucho el narcisista solamente se deprime, no por perderte sino porque su ego se ve afectado con que tú te le hayas salido de control.
Lo que espera con esto es que tú aprendas a no confrontarlo, controlarte y mostrarte que es él quien tiene poder sobre ti y lo que tú estás esperando es que aprenda a respetar los límites. Con lo que, pasado el tiempo de castigo que te está dando, tú regresas pensando que ya aprendió y él regresa para vengarse por lo que hiciste y el maltrato será mucho mayor.
Por eso poner límites no funciona con un narcisista, solamente pasas malos ratos y ponerte en peligro porque no sabes hasta dónde llegará con su venganza. El único límite que funciona es el contacto cero, sacarlo de tu vida tan pronto como sea posible para poderte recuperar.